El fotocatalizador más habitual, TiO2, no es termodinámicamente capaz de generar ozono (O3) a partir del oxígeno (O2) o del agua (H2O). Por tanto, este gas no se produce en los procesos fotocatalíticos, ni es un intermedio habitual de las reacciones involucradas en estos procesos.
Aunque una pequeña parte de los productos de degradación de contaminantes sean sólidos, en general, se puede decir que la generación de materia particulada susceptible de afectar negativamente al ser humano, es poco probable. Sí puede darse, en el caso de la aplicación de la fotocatálisis en superficies (pavimentos, fachadas…) el desprendimiento de partículas de TiO2 (ver respuesta a la pregunta Efectos Adversos a la Salud Humana).